terça-feira, 3 de agosto de 2010

Escena de la película: Soldados de Salamina



Informaciones sobre la película:


EN LA PLAZA DE MI PUEBLO

EN LA PLAZA DE MI PUEBLO

Adaptación de la melodía de la popular canción "El Café de Chinitas". Durante la guerra civil, el cancionero popular españo fue adaptado, sobre todo en el bando republicano, con textos alusivos a la contienda.

En la plaza de mi pueblo
dijo el jornalero al amo
"Nuestros hijos nacerán
con el puño levantado".

Esta tierra que no es mía
esta tierra que es del amo
la riego con mi sudor
la trabajo con mis manos.

Pero dime, compañero,
si estas tierras son del amo
¿por qué nunca lo hemos visto
trabajando en el arado?

Con mi arado abro los surcos
con mi arado escribo yo
páginas sobre la tierra
de miseria y de sudor.


sábado, 31 de julho de 2010

Los Judios Y La Guerra Civil Española

"El 18 de julio de 1936 los militares más conservadores del Ejército español se levantaron en armas contra la República. este acto significaba el fin del experimento democrático realizado en España desde abril de 1931 y el comienzo de lo que conocemos con el nombre de Guerra Civil Española. La caída de la Dictadura del general Miguel Primo de Rivera y el descrédito de la Monarquía habían posibilitado la proclamación de la II República Española como panacea que pretendía sacar al país de su histórico atraso. El 17 de julio de 1936 los militares más conservadores del Ejército se levantaron contra el gobierno de la República.   El alzamiento comenzó antes de lo planeado en Melilla. Pronto se extendió a Tetuán y a Ceuta, prácticamente todo el Marruecos español estaba en manos de los rebeldes antes de que Franco, procedente de las Canarias, se pusiera al mando de las tropas sublevadas. Al día siguiente, 18 de julio, el levantamiento se extendió a la Península. El 21 de julio se podía ya trazar una línea aproximada que dividía las zonas donde había triunfado la rebelión de aquellas donde había fracasado (ver mapa). La rebelión fue derrotada en cinco de las siete principales ciudades de España. Las principales zonas industriales quedaron en poder de la República, pero las más vastas zonas agrícolas del país, apoyadas por campesinos conservadores, quedaron en manos de los rebeldes. La mitad del Ejército, casi toda la escuadra y dos tercios de las fuerzas aéreas españolas quedaron en poder de la República pero con los sublevados habían quedado las más numerosas y mejor entrenadas tropas del Ejército español, los 40.000 hombres que componían las tropas de regulares. Los rebeldes contaron desde el primer momento con el apoyo de Italia y Alemania. El bando republicano contó con la ayuda de la Unión Soviética y de los combatientes que formaron las Brigadas Internacionales y que llegaron de todas partes del mundo.
 A comienzos de la Guerra Civil, en España vivían cerca de 6.000 judíos, la mitad de ellos había nacido en España o ya vivían allí antes de la proclamación de la Segunda República, la otra mitad se componía de refugiados que huyeron de Alemania ni bien el nazismo accedió al poder, en 1933 (en esa época España era uno de los pocos países que daban refugio a los judíos). La mayor parte de estos judíos se establecieron en Barcelona donde crearon la Judischer Kulturbund ("Liga de la Cultura Judaica"), asociación cultural de izquierda, ligada al comunismo ortodoxo catalán. Cuando fue la sublevación nacionalista, muchos judíos, pertenecientes a la asociación deportiva judía Hapoel, se encontraban en España en la Ciudad Condal para participar de las Olimpiadas Obreras que se desarrollarían en oposición a las Olimpíadas de Berlín, organizadas por los nazis. Las olimpíadas no pudieron realizarse por el levantamiento de los rebeldes, y los jóvenes del Hapoel estuvieron entre los primeros en ofrecerse como voluntarios para combatir contra Franco. Un significativo número de judíos, en su mayor parte comunistas y miembros del partido revolucionario Bund, se enroló en las Brigadas Internaciones. Ni bien estalló la guerra el Gobierno de la República buscó el apoyo para su causa tanto de personas como de instituciones judías, por lo que nombró a algunos judíos como sus representantes en el exterior. 
(...) 
El mundo judío ofreció un gran apoyo a la República , especialmente el intelectual, de dos maneras: a través de la prensa judía, mayoritaria en el apoyo a los republicanos y la segunda a través de las Brigadas Internacionales. El mundo judío intelectual y la prensa judía se sumaron al apoyo a la República, a la que consideraba como un baluarte en la defensa de la libertad. Numerosos periódicos judíos apoyaban la causa republicana. En casi toda la prensa judía y especialmente en la de los judíos alemanes el apoyo estaba basado en la conciencia que se tenía del conflicto que se debatía en la Guerra Civil. En un periódico de judíos alemanes  expatriados “Judische Revue” de 1937 se decía: “El antisemitismo está afilando sus armas contra los judíos en una conspiración internacional”. La expresión de esta opinión fue demostrada a través de la llegada de voluntarios judíos de la mayoría de los países, donde también había grupos de judíos sefardíes, sionistas, socialistas, comunistas etc. La prensa fascista italiana así como la nazi, denunciaba sistemáticamente el fuerte apoyo judío a la causa republicana. Así se denuncian a familias judías inglesas por haber contribuido económicamente para sostener al bando republicano, entre ellos se denunció a Henry Strakoch, presidente del periódico The Economist." 

Más en: http://www.milimcultural.com.ar/articulos/gce.htm 

Himno de marcha de las Brigadas


País lejano nos ha visto nacer.
De odio, llena el alma hemos traído,
mas la patria no la hemos aún perdido,
nuestra patria está hoy ante Madrid,
mas la patria no la hemos aún perdido,
nuestra patria está hoy ante Madrid.
Camaradas, cubrid los parapetos,
que la vida no es vida sin la paz.
Defended con el pecho vuestros hijos,
os ayuda la solidaridad;
defended con el pecho vuestros hijos.
os ayuda la solidaridad.
Libre España de castas opresoras,
nuevo ritmo el alma batirá,
morirán los fascismos sangrientos,
en España habrá ya felicidad;
morirán los fascismos sangrientos,
en España habrá ya felicidad.
Generales traidores a su patria
del fascismo quieren saciar la sed;
mas los pueblos del mundo defendemos
lo que España jamás ha de perder;
mas los pueblos del mundo defendemos
lo que España jamás ha de perder.
Guerra al pueblo no hacemos como ellos,
pues nosotros luchamos por la paz,
con el triunfo del mundo antifascista
la tierra ensangrentarán;
con el triunfo del mundo antifascista
la tierra ensangrentarán.
Si al combate marchamos con arrojo
para España obtendremos libertad.
Morirán los fascismos sangrientos,
en España habrá ya felicidad;
morirán los fascismos sangrientos,
en España habrá ya felicidad.

Las Brigadas Internacionales en el conflicto




La composición de las Brigadas Internacionales difiere de la división ideológica y política del período en que ocurrió la Guerra Civil Española, una vez que recibió voluntarios italianos, portugueses y de otros países, cuyos jefes apoyaban o eran simpatizantes al franquismo, junto a voluntarios de diversos países. A pesar de la grande oposición entre el bando nacional y del bando republicano, los voluntarios se presentaban como un grupo más heterogéneo, desde sus motivaciones para luchar( ideológicas, económicas, etc.), sus clases sociales o origines.
Durante la Segunda República, España pasaba por una fuerte polarización: había una izquierda revolucionaria y una derecha fascista; aunque había la presencia de fuerzas para la manutención de la estructura tradicionalista conservadora y fuerzas externas por cambios en ella. En un solo país podría verificarse la polarización presente en la Europa.
A pesar de la neutralidad de las democracias occidentales, muchas tenían ciudadanos miembros de las brigadas internacionales. Esta neutralidad pude ser vista en el Comité de No intervención, que tenia como miembros entre otros, Francia, Gran-Bretaña, Italia, URSS y Alemania. Las naciones democráticas, como Francia y Gran-Bretaña no tomaran una posición efectiva en el conflicto, debido a la amenaza fascista, como también a la amenaza comunista, tan indeseada. A ejemplo de la Sociedad de Naciones formada después de la primera guerra mundial, los posibles acuerdos y resoluciones que podrían ser formados en el Comité eran escasos, debido a su no efectividad como organismo y no consenso entre sus miembros.
La salida de los voluntarios apenas ocurre en 21 de septiembre de 1938, después de tentativas fracasadas, como la proposición británica de 1937( presente en la noticia del periódico La Vanguardia en 25 de mayo de 1937) presentada al Comité de No Intervención, principalmente debido a su composición, ya que había países con intereses claramente divergentes, como Francia y Gran-Bretaña de un lado y Alemania y Italia en otra posición, además había la presencia soviética; Y el periódico antes mismo de la discusión de la proposición en el Comité, ya vía su fracaso debido a eso. Como declaró el redactor diplomático del “Manchester Guardian”( 25 de mayo de 1937) la proposición inglesa tenía un valor como experiencia. “Quizá se dan cuenta del valor irreal de esta sugerencia, ya que los voluntarios constituyen la fuerza esencial.”
El conflicto posterior, la Segunda Guerra Mundial, ya presentaba muchos de los factores para su desarrollo durante la Guerra Civil Española y los obstáculos para posibles acuerdos y soluciones pacíficas también eran presentes, bien como también el cuidado y mismo concesiones que las democracias occidentales daban a Alemania, que se fortalecía. Como ejemplo ha la posición británica sobre la petición del Gobierno Vasco para investigar la destrucción de Guernica, en que los británicos solicitaran la opinión de los gobiernos francés, alemán, soviético, italiano y portugués, poniendo en relevo que si los Gobiernos aceptasen la investigación, ella podría extenderse a otros casos semejantes.
El anuncio del Gobierno republicano en retirar las frentes de las Brigadas Internacionales en 1938, esperando lo mismo de las tropas italianas e alemanas que formaban parte del bando nacional, en mucho que contribuirán para el suceso de Franco, una vez que enflaqueció el bando republicano . Eso revela que los voluntarios tanto en el bando republicano como del bando nacional correspondían a una fuerza esencial en el conflicto.


El envolvimiento de otros países en la Guerra Civil española puede entonces ser visto por un foco oficial, presente en el Comité de No Intervención, cuya poca efectividad contribuyó para su interferencia y mediación igualmente pequeña. Por otro foco( no oficial), los extranjeros componentes de las brigadas extranjeras- la Brigada Internacional en apoyo a la Frente Popular y los voluntarios del bando nacional- fueran esenciales para el desarrollo del conflicto, bien como sus resultados. La diversidad de las Brigadas Internacionales también eran importantes, porque vivían en un período de fuerte polarización ideológica y política que puedo ser vista en la Segunda Guerra Mundial y esas personas contribuirán para la vuelta de la esperanza de los españoles que vivían los horrores de una guerra entre su proprio pueblo, como puede ser visto en el poema “Llegada a Madrid de la Brigada Internacional” de Pablo Neruda y según ello, serian sus hermanos- habían dejado sus patrias para luchar en un conflicto en que no tenían nada a ganar o que no tenían nada que ver.
“(...) Porque habéis hecho renacer con vuestro sacrificio
la fe perdida, el alma ausente, la confianza en la tierra,
y por vuestra abundancia, por vuestra nobleza, por vuestros muertos,
como por un valle de duras rocas de sangre
pasa un inmenso río con palomas de acero y de esperanza”

Es una pena que para eso fuera necesario sangre y sufrimiento, una vez que la palabra de los diálogos y de los acuerdos fueran despresados, mismo que eso llevase a muertes y sufrimiento. Y como la guerra civil española es considerada una preparación para la Grande Guerra en sus tácticas de guerra y la posición de las partes presentes en el conflicto; lo mismo puede ser verificado por semejantes cuestiones diplomáticas que se repitieran, mas cuyas repercusiones fueran aún más grandes.